Enric Batiste (Barcelona): L'era de n'Elies, Espolla, 2010
Me siento en este banco, compañero de mi alma
que ha vivido conmigo los viajes por las cuevas
donde me he guarecido, y he querido contar
que a la entrada de casa continúa la calle.
Un banco vacío es un silencio lleno de promesas de palabras. Un banco es un espacio público, ni tuyo ni mío, sino de todos. Allí donde no había un espacio, un banco crea un espacio de conversación...